Dr. S es un reconocido médico e investigador biomédico, comenzó a perder
la visión cuando llegó a sus sesenta años. Dado sus antecedentes como médico y
distinguido científico no tuvo problema en encontrar al mejor oftalmólogo. Sin
embargo tuvo problemas para comunicarse con él. Hablaban el mismo lenguaje y
compartían el mismo campo de conocimiento. Al Dr. S se le diagnosticó
degeneración macular una causa irreversible y progresiva de ceguera y se le
dijo que no había nada que se pudiera hacer por él. Mucho después y a través de
conversaciones con no profesionales Dr. S aprendió que podía hacerse mucho por
él.
“Creo que existe ese raro médico que tiene el tiempo, la energía y la
intuición para dedicar profunda atención a lo que está pasando en el resto de
su paciente. Puede ocurrir que mi médico no puede hacer nada por mis globos
oculares, pero detrás de ellos hay un hombre ansioso, preocupado que demanda estímulos
y que está desprovisto de los estímulos sensoriales acostumbrados y por él se
puede hacer mucho. Las complicaciones de la ceguera no están en los ojos sino
en todas partes. Una de las complicaciones es el dolor producido por
traumatismos reiterados en las superficies pretibiales a 30 cm del piso. Es un
problema común en los pacientes con ceguera pero no es mencionado en ningún
texto de oftalmología. Considero que la ceguera representa un fracaso para la
mayoría de los oftalmólogos, así como la muerte representa un fracaso para los
internistas. Los internistas no tienen que lidiar con los pacientes que han
muerto, pero el paciente ciego sigue vivo y la incapacidad del oftalmólogo para
hacer frente a la ceguera tiene un importante impacto en el paciente. Los
oftalmólogos niegan a sus pacientes cualquier tipo de ayuda porque se sienten
derrotados. No son consientes de los innumerables apoyos que pueden volver la
vida mas tolerable a un paciente ciego.
“Si mi médico me hubiese hablado de relojes pulsera parlantes o libros
parlantes mi mundo podría haberse transformado de un infierno viviente en un purgatorio,
incluso en un cielo”
Dr. S concurrió a ver al mejor oftalmólogo disponible de acuerdo a todos
los criterios profesionales posibles. Su problema podría haber sido mejor abordado
si se hubiese consultado a un médico de familia en coordinación con su
oftalmólogo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario